¿Mamá vamos a la cancha mañana? Justo mañana no puedo, viene la tía Lili.
¿Papá me trajiste las medias para danza? ¡Me olvidé!
¿Seño, seño, seño, seño? Esperame un ratito Luana, que estoy ocupada.
¿Abuela me cuentas un cuento? Bueno dale, ¿cuál quieres?
¿Abuelo me enseñas a martillar? Si claro, agarra de la caja el que es redondito.
Tal vez alguna de éstas frases te resuene.
Sabemos que la vorágine diaria de trabajo y obligaciones, nos quita de lo más hermoso de la vida, que es el amor y sobre todo en la niñez.
Postergar es un hábito de la modernidad; nos creemos inmortales y si bien lo somos en el alma, en el cuerpo físico, no.
Sugerencia: Prueba hoy comenzar a regalarte tiempo; comienza con algo pequeño y ponte cada vez un desafío más grande.
Mi madre decía: ¨llegamos desnudos y nos vamos desnudos¨. Si te quedan dudas de ésta frase, pregúntale hoy a un brasileño inundado.
Rosaria Verissimo