Cuando viaje a India la primera vez, un médico ayurveda me atendió en su consultorio en la calle. Me hizo un par de preguntas, me tomó el pulso, me miró los ojos, abrió un cuaderno con fórmulas anotadas, eligió una y le pidió al asistente que la preparara. Este un joven aprendiz, puso en una bolsita de papel improvisada, algunas hierbas y condimentos. Tomé el preparado todo el mes que estuve viajando y mi sistema digestivo cambió por completo.
*Ramiro Calle, gran maestro de yoga español, afirma que antes que la ciencia existió el Yoga, y no es un capricho personal, es simplemente remitirse a los datos históricos para demostrarlo.
Él sostiene que el yoga, (aclaremos aquí que no sólo se refiere a la práctica de posturas, que es sólo una parte del yoga), basado en observación, ensayo, práctica y experiencia, no necesita de tomografías, análisis clínicos, ni resonancias; afirma que la ciencia debería abrazar el yoga sin juicios y sin prejuicios, y que ambos deberían convivir y apoyarse.
Personalmente, entiendo que la prevención como base de la salud, debería estar dado por el Yoga, y la curación por la medicina alopática occidental.
Creer y confiar en una en particular, es ver la vida con un solo ojo.
Y, por último, como digo siempre, Yoga no es sólo ir dos veces por semana a la clase, es mucho más que eso, es una manera de ver y vivir la vida.