Tejer es un arte, puedo afirmarlo, soy la hija de una extraordinaria tejedora.
He visto a mi madre destejer muchas veces; no avanzaba si creía que el tejido no era ¨perfecto¨, como ella decía.
La vida es un tejido propio y social. Es necesario tejer y destejer todo el tiempo.
Desde luego, tejer, es crear, y por ende más fácil que destejer.
Sería maravilloso estar plenamente conscientes del momento presente para no cometer errores y pasar por el tedioso momento de destejer. Pero lo cierto es que todos destejemos a diario, mal que nos pese.
¿Y si probamos aceptar que destejer es parte del proceso de aprendizaje y por lo tanto un camino obligado para llegar a la meta? ¿Si nos damos la oportunidad de equivocarnos? ¿Si aceptamos que aún, siendo l@s mejores tejedor@s, el error es parte de la vida? Seguramente todo sería más suave, liviano y hermosamente tejido.