COMER NATURAL
El mito de la perfección:
Entré a la casa de veraneo; los turistas estaban tomando el desayuno bajo una parra de uvas moradas, gigantes y maduras. En la mesa de la cocina, dentro de la frutera, unas bellas y perfectas uvas blancas, esperaban para ser comidas. Le dije al señor: pueden comer estas uvas, señalando las de la parra, sólo deben lavarlas porque tienen algunas hormigas, a lo que el señor contestó, también deben ser lavadas por los ratones.
A la semana siguiente volví y las uvas de la frutera ya no estaban pero las de la parra, no solo seguían en el mismo lugar, sino que estaban más maduras, más ricas y algunas ya habían caído manchando el piso. Las corté pacientemente y las puse en un hermoso plato típico del mediterráneo siciliano, limpié el piso para que no se manchara, y le ofrecí al señor que las comiera, aunque intuía que no iba a hacerlo.
Hoy desayune uvas moradas.
Mientras el mito, inculcado por el mercado de consumo, dice que cuanto más grandes, brillantes y hermosas a la vista, mejor son, la realidad del naturismo nos dice todo lo contrario.
Las uvas moradas, lavadas, hasta si se prefiere con un poco de cloro, no contienen ningún tipo de agro-químico, o sea ni fertilizantes ni pesticidas; están cortadas en el momento justo, con todas las propiedades de una fruta madura y orgánica; eso sí lucen desparejas y desprolijas, pero que quede claro, la salud física, no sabe de estética.
Rosaria Verissimo
Hermosa y perfecta naturaleza!! Gracias!! Me encantó. Abrazo
Gracias Marina!!!! A seguir respetando y amando nuestra naturaleza!!